Una jornada cálida acompañó a los niños dorenses a festejar su día. Al comenzar la mañana, ya se pudo observar a los vecinos trabajar a fin de agasajar a los más pequeños.
En el domicilio de Dominga, en el Bajo Avellaneda, se realizó la tradicional chocolateada que incluyó, el reparto de golosinas y sorteos a los niños presentes; todo esto gracias a la buena voluntad de esta vecina que contó con la colaboración de muchos de sus amigos
En el domicilio de Dominga, en el Bajo Avellaneda, se realizó la tradicional chocolateada que incluyó, el reparto de golosinas y sorteos a los niños presentes; todo esto gracias a la buena voluntad de esta vecina que contó con la colaboración de muchos de sus amigos
En el barrio Cooperativo, domicilio de Carlitos Chazarreta, los niños del sur dorense, también festejaron tomando chocolate, facturas, etc. y recibiendo un obsequio.
Por la tarde, el salón parroquial fue el lugar de encuentro de los chiquilines que disfrutaron todo lo preparado por las colaboradoras de la Iglesia San Antonio de Padua.
Desde las 16hs, toda la familia se trasladó al parque de diversiones acompañando a sus niños a disfrutar de los diversos juegos gratis que se ofrecío para culminar un domingo lleno de emociones infantiles.
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